El día lunes 6 de agosto próximo pasado en horas de la mañana se cayó parte del cielo raso de la oficina correspondiente a la Mesa de Entradas del Juzgado Civil y Comercial nº 23 de esta Ciudad producto de una rajadura preexistente en el techo de dicha dependencia. Por suerte no hubo que lamentar heridos en virtud de esa caída. Ni crxs que trabajan allí, ni justiciables que se encontraban presentes.
Muy a pesar de que se denuncio en 2017 y en el transcurso de este año la existencia de grietas en los techos del juzgado, ninguna medida precautoria se ha tomado para evitar lo que tristemente sucedió.
Ni bien se produjo el suceso de público conocimiento, lxs crxs del Juzgado se comunicaron con la A.J.B. y allí la conducción se hizo presente realizando las denuncias correspondientes tanto al Superior Tribunal de Justicias como a la Dirección General de Obras y Arquitecturas de la S.C.J.B.A.
Durante el transcurso del día se realizó en la puerta del Organismo citado una asamblea con lxs trabajadorxs del sector donde se informo las acciones realizadas en su inmediatez y se discutió las acciones a seguir con el objeto de evitar que lo mismo ocurriese en un futuro.
El día martes a las 8 hs. se realizo una nueva asamblea en la puerta de dicha dependencia, con la presencia de decenas de crxs de otros organismos del Poder Judicial se informo de lo sucedido, lo que se realizó el día anterior y se definió realizar la denuncia respectiva ante el Ministerio de Trabajo de la Provincia de Buenos Aires solicitando la inmediata inspección general del edificio central y en particular la del Juzgado Civil y Comercial nº 23.
Esta situación de crisis de edilicia e infraestructura en el poder judicial no es nada nuevo, lamentablemente hemos denunciado de manera sistemática las condiciones indignas en términos de seguridad y condiciones de trabajo en este poder del estado. Han transcurrido décadas de abandono, con mero maquillajes superficiales, y que tiene que ver con la reducción del presupuesto para el Poder Judicial, gobierno tras gobierno, teniendo en cuenta que allá por fines de los 80 principios del 90 el presupuesto para la Justicia era del 7% respecto de la totalidad del presupuesto de la provincia, donde lógicamente que las condiciones laborales y salariales eran otras y con un sistema porcentual que dignificaba nuestra labor. Arrebatado ese derecho el presupuesto económico para el funcionamiento de la Justicia ha decrecido de manera paulatina sosteniéndose con el actual 4,5%.
En estas condiciones, con una densidad demográfica que ha crecido de manera exponencial y por ende se ha producido un aumento de la litigiosidad permanente, es muy difícil que se pueda brindar un servicio de justicia acorde a las necesidades de las mayorías y trabajar en condiciones dignas y seguras.
Es por ello que denunciamos este estado de situación y exhortamos al poder Ejecutivo a discutir un presupuesto que incremente las partidas para poder brindar una justicia acorde a la realidad actual, condiciones de trabajo dignas y un salario digno para todxs los que integramos este poder del Estado.