
Nuestra condición de mujeres y/o disidencias, en el ámbito del Poder Judicial de la provincia de Buenos Aires, nos sigue colocando en un lugar de discriminación, producto del patriarcado que atraviesa a todas las instituciones, sin excluir la nuestra, discriminaciones que ya no estamos dispuestas a tolerar dentro de nuestros ámbitos laborales.
Este 8 M paramos y recuperamos las calles, exigiendo que nuestras demandas como mujeres y trabajadoras sean efectivamente abordadas. Marchamos para erradicar la violencia machista en nuestras casas, en nuestros trabajos y en todos nuestros ámbitos de participación. Marchamos para erradicar el acoso y la violación, individual y/o grupal, perpetrada por hijos sanos del patriarcado, en todos los espacios en que desarrollamos nuestras relaciones interpersonales. Marchamos para erradicar los femicidios, transfemicidios y travesticidios, para no tener la necesidad de seguir gritando año a año ni unx menos.
Marchamos para erradicar condiciones laborales desiguales por nuestra condición de mujeres o disidencias. Marchamos para exigir una reforma judicial feminista, que nos garantice una vida libre de violencia y un real acceso a nuestros derechos. Marchamos para exigir que se respete efectivamente la autonomía sobre nuestros cuerpos. Marchamos para exigir la real implementación del cupo laboral travesti-trans. Marchamos y movemos el mundo, porque trabajadoras somos todas y la deuda es con nosotras.
Paramos. Marchamos.
8M. Te esperamos a las 15:00 hs en la puerta del sindicato, calle 55 #910 entre 13 y 14. Marchamos.